Llegamos a Azuaga cerca de las 11 de la mañana, y comenzamos nuestra ruta por el pueblo de anchas calles y poca gente en la calle.Nuestra paseo comienza en la iglesia del Cristo del Humilladero, una parroquia tan popular que no se cierra nunca, solo a medio dia y por la noche.En el interior de la iglesia hay un pequeño tesoro.
Después fuimos a ver el Museo etnográfico de la localidad,este lugar tiene la magia del recuerdo del ayer, porque a pesar de no estar en Andalucia, estamos tan cerquita que sus costumbres son las nuestras y su pasado es el nuestro, y aún más para los bormujeros, ya que nuestro municipio se ha dedicado al campo al igual que los azugueños.En el museo vimos objetos curiosos que hacia decadas que no se veían y que trajo muchos recuerdos a nuestros vecinos, y de los que os dejo aqui una pequeña muestra en fotos.
Atención al bracerillo que se llevaban los alumnos a clase con cisco desde sus casas para estar calentitos durante las clases, ya que a principios del s.XX no había calefacción en el cole.
Seguimos nuestro paseo por la plaza de la Merced donde se encuentra el Ayuntamiento, la Casa de la Cultura, y la iglesia de la Merced.
Seguimos nuestro camino por una calle ancha llena de casas señoriales hacia la parroquia de Nuestra Señora de la Consolación, patrona del pueblo. Lo más llama la atención de es su monumental fachada. Es un edificio que se inició en el s. XV, es la iglesia más importante de la provincia.
Su interior es igual de magestuoso, lo primero que vimos es una capilla bautismal, en el exterior y coronando el arco figuras en rosetones con Jesucristo y los apóstoles cada uno con su atributo, y en el interior dos alacenas donde se guardaban los elementos necesarios para el bautismo.
Me llamó mucho la atención por lo haberlo visto en ningúna iglesia anteriormente, es que parte de la techumbre es azul,por lo visto en una restauración reciente descubrieron el color y decidieron dejarlo así, lo curioso es que solo es parte de las bóvedas, en la zona del retablo de la Inmaculada, que tendría su lógica por ser el color que la identifica, y parte de las naves de los pies.
En el interior de la iglesia, hay numerosos retablos, el retablo mayor es una réplica del primitivo que fué quemado, no se sabe a ciencia cierta de la fecha de este incidente.
Este retablo es de un Cristo de marfil, en tres piezas, el cuerpo y los dos brazos del s.XVI.
Terminamos nuestro paseo por las calles de Azuaga, y nos dirijimos a un restaurante de la localidad, llamado "Las Conchas", donde todas sus paredes están cubiertas de conchas.
Cuando terminamos de comer, fuimos a tomar café a un pueblo cercano y también muy grande, pero igualmente vacio en sus calles, allí pudimos ver la maravillosa plaza del pueblo, y comprar unas magdalenas exquisitas en el Convento de Santa Clara, donde vimos además a un San Jerónimo de Martinez Montañez.
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